A veces cuando innovas cometes errores. Es mejor admitirlos rápidamente y seguir adelante apostando por tus otras innovaciones. Steve Jobs
El fracaso es algo inevitable.
Todos fracasamos. Tarde o temprano metemos la pata y la liamos. Esto es así. Puede gustar más o menos, pero todos en algún momento nos metemos la cabeza en el culo y las liamos de alguna manera. Por eso hoy quiero contarte mi historia personal con los 4 principales errores que he cometido en mi carrera profesional:
- Escuché a mas gente de la que debía. Cuando empiezas un proyecto nuevo, y sabes que no conoces al 100% la materia que vas a tratar, sueles pensar que todos saben más que tu. Este fue uno de mis principales errores. Cuando me hablaban de manera certera y firme sobre algo que yo desconocía, daba por hecho que tenían razón. Este error me ha llevado a tomar cientos de malas decisiones por no tener una mentalidad más critica. El entorno es una parte fundamental de la vida de cada persona, y si no te molestas en observar y ser critico con él, acabarás por escuchar voces que son nocivas y tóxicas para tu proyecto. Recuerda siempre que la ultima opinión es la que importa y esa es la tuya. Por mucho que sepa una persona siempre has de ser critico con la idea que te proponen por que nadie esta libre de equivocarse.
- Me faltó humildad. Cometí el error de pensar que sabía lo que los clientes querían. Di por hecho que mi producto era mejor y que lo querrían solo por ser nuevo y distinto. No me subí a las tendencias pensando que yo crearía una nueva. El entender una necesidad y ver un nicho de mercado ya me hizo pensar que yo podría llevar una empresa que se ocupara de ello. Nada más lejos de la realidad. No se puede luchar contra el mercado y menos crear una empresa con desconocimiento. He aprendido que de base, por muy claro que vea la oportunidad de negocio, no se que quieren mis clientes y que es vital entenderlos y empatizar con ellos.
- Dejé que los míos se implicaran más de lo debido. Cuando las cosas iban mal, lejos de cortar por lo sano, deje que mis allegados me ayudarán realizando sacrificios por mi. El amor y el cariño que me arropó en mis momentos de dificultad me hicieron poner en riesgo a la gente que aprecio. Y todo esto sin contar con el hecho de que descuidé todas mis relaciones sociales. En el momento solo vi una muestra de cariño y una solución a un problema. Hoy entiendo que fue un error estúpido que puso en riesgo a mis allegados, a los cuales ni si quiera les prestaba la atención que merecían por que estaba muy concentrado en mi trabajo. Y os contaré un secreto: ningún trabajo vale tanto. Cuando alguien nos quiere nos intenta ayudar como puede y con las herramientas que tiene. Está en nuestra mano entender si vale la pena o no el sacrificio de los demás en nuestras vidas. No digo que nadie te tiene que ayudar nunca ni mucho menos, pero si ha de entenderse que la ayuda debe ser asertiva y moderada.
- Me enamoré de una idea. Mis ideas me gustaban tanto que me volvían estúpido. Me nublaba la fantasía idílica que tenia en mi cabeza sobre lo bien que iría todo. Y eso francamente acabó por matarme. El amor no está para las ideas o los negocios. Está para las personas. Es bueno que tengas pasión por tu trabajo, pero no que te enamores de él, por que al fin y al cabo, solo es un trabajo. Los proyectos deben ser los medios para conseguir los objetivos, no los objetivos en sí. Si una idea, por muy bonita que sea, no esta funcionando se ha de descartar y luego pasar a otra cosa. No vale la pena perder tiempo en cosas que no funcionan. Si fracasas lo asumes, aprendes de ello y continuas con tu vida.
En resumidas cuentas puedo decir que la cagué. Pero rescato de estos errores cuatro lecciones muy importantes: se critico con todo lo que leas y escuches, se humilde ante todo, no dejes que los demás paguen por tus errores y no te enamores de las ideas. Estos cuatro puntos me parecen de las lecciones más importantes que he podido aprender en la vida a título profesional. Realmente creo que estas experiencias me han dado unas herramientas únicas e invaluables. Tenéis que entender que vuestros errores son vuestra mayor escuela y que el fracasar es una putada a la que no debemos tener miedo. Debemos esperar el fracaso de manera muy atenta para poder aprender de él todo lo posible. Solo así creceremos y conseguiremos disminuir el riesgo de volver a cagarla.
Y por ultimo quiero daros una ultima pauta que tarde mucho en aprender: No dediquéis el 100% de vuestro tiempo a una sola idea. Es bueno que desconectéis un rato. Tener en cuenta que el tiempo libre también se puede rentabilizar. Por ello os invito a pasar por el enlace que os comparto en este párrafo donde encontraréis 4 series para rentabilizar vuestro tiempo libre y a la vez podáis desconectar un rato.
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